La alopecia, también conocida como caída del cabello, es la pérdida parcial del cabello de una persona en poco tiempo. Además del cabello, la barba, las cejas y las pestañas se pueden perder debido a esta enfermedad. La pérdida de cabello generalmente ocurre en personas jóvenes. Cualquiera puede sufrir pérdida de cabello, pero es más común en los hombres.

Aunque se cree que la pérdida de cabello es el resultado de enfermedades autoinmunes, se desconoce la causa exacta. El término “enfermedad autoinmune” significa que su sistema inmunológico ataca por error a sus células. Sin embargo, según algunas investigaciones, la caída del cabello está relacionada con factores genéticos. Además, enfermedades como el eczema, la enfermedad tiroides y la psoriasis aumentan el efecto de estos factores genéticos.

Aunque la caída del cabello varía de una persona a otra, su apariencia es específica. Aparecen una o más zonas sin pelo en el cuero cabelludo en poco tiempo. Estas áreas son fácilmente visibles. La pérdida de cabello en estas zonas es diferente en cada persona.

Los síntomas de la caída del cabello son específicos y se pueden entender sin ir al médico. Pero en cualquier caso, es necesario consultar a un médico.

El tratamiento de la alopecia lo realiza un dermatólogo. En los casos en que la enfermedad se supera levemente o se detecta en sus primeras etapas, el cabello a veces puede volver a crecer sin ningún tratamiento. En casos severos, la enfermedad se trata con varios medicamentos.